SEIP - Sociedad Española de Investigaciones Parapsicológicas

Estadísticas

Usuarios: 29019
Noticias: 446
Enlaces: 27

Mini Chat

Ultimo Mensaje: 5 años ago
  • chellois : viendo esta pagina tiene uno la impresion de ver una imagen fijada en el pasado nada a cambiado en la pagina de la asociacion desde hace anos
  • Jupaen : Hace mucho tiempo que no se actualiza la web?
  • beaseip : «email»
  • beaseip : Hola a tod@s: IMPORTANTE, para inscribiros al Simposio, utilizad sólo el email de yahoo... «email»  GRACIAS!
  • talko : hola bea cuando pones en la pagina la lista de ponentes??
  • talko : hola beaseip
  • beaseip : Hola a tod@s: IMPORTANTE, para inscribiros al Simposio, durante los días 28 y 29 de Junio, utilizad sólo el email: «email»  GRACIAS!
  • Lara : hola,,adan,,,?
  • vitor : hay alguien?
  • vitor : hola
Accede a la Web

CHAT SEIP

Proyecto IVAN Imprimir E-Mail
Escrito por Administrator   
viernes, 17 de noviembre de 2006

Proyecto IVAN

 

           

Por: Inko Zubillaga ( Coordinador SEIP Guipúzcoa )

CRÓNICA DE UN ORIGINAL EXPERIMENTO SOCIOLÓGICO

 

 

 

Irún, 4 de enero de 1979. 8:00 P.M.

Un nutrido grupo de ciudadanos se arremolina a la entrada del céntrico bar Gaztelu de Irún. Sus miradas, fijas en dirección a los montes denomina­dos Peñas de Aia, revelan nerviosis­mo. La tensión aumenta a medida que los viandantes se unen a tan pecu­liar concentración. Una llamativa formación luminosa compuesta por luces intermitentes de diferentes colo­res se encuentra, por lo que parece, posada sobre la falda de las monta­ñas. Los más apa­sionados hablan de OVNIs; otros lo atribuyen a las fogatas de los Boy-Scouts que por allí acostumbran a acampar... Sin embargo, nadie sabe a ciencia cierta lo que está sucediendo a tan solo un par de kiló­metros de Irún. Lo que la mayoría del grupo, a excep­ción de un par de “ganchos”, ni siquiera se puede imaginar es que los organizadores del espectáculo tienen nombres y apelli­dos, y que el “No Identificado” ha pasado la “ITV” y lleva matrícula de San Sebastián...

 

 

El Proyecto Iván

El multitudinario avistamiento en pri­mera fase sucedido la noche del 4 de enero de 1979 resultó ser la anéc­dota más interesan­te del experimento sociológico llevado a cabo por el extinto Centro de Estudios Paracientíficos de Irún (C.E.P.). El objetivo del proyecto consistía en demostrar que una oleada OVNI puede ser inducida a partir de la sensibilización de la opinión pública respecto al fenómeno mediante la difusión en los media de  diversos casos falsos.

   Los coordinadores del C.E.P., Felix Ares de Blas y su esposa M’ Carmen Garmendia, Juan Carlos Imaz, Jesús María Landart, José Manuel Báez y los hermanos Rafael, Xabier y Juan Antonio Puerta, entre otros, confeccionaron un sofisticado “programa de actividades” que incluía el minucioso diseño de falsos casos OVNI hasta el montaje de lo que más tarde sería calificado como “OVNI de Peñas de Aia”.

 

Génesis y desarrollo del Proyecto

Uno de los miembros del C.E.P. que impulsó el Proyecto Iván, Juan Antonio Puerta, accedió amablemente a explicarnos cual fue el origen de tan exitoso expe­rimento.

 

-Los miembros del C.E.P desarrollamos muy pronto nuestra vena crítica en lo que a OVNIs se refería. Pudimos comprobar cómo existe mucho fraude en este espinoso asun­to. Bien es cierto que pueden producirse fenómenos aéreos inexplicables, pero tam­bién es cierto que todos ellos pueden tener un fundamento científico si alguien se moles­ta en investigarlos. Basándonos en este razonamiento, fuimos madurando una hipó­tesis sociológica que explicara el por qué de los “No Identificados”. Defendimos que el ser humano necesitaba en aquella época creer en algo y que por ello recurría a los OVNIs y extraterrestres.

 

-¿Y por qué en aquella época?

 

-Estamos hablando de finales de 1978 y comienzos 1979, momento en el que las reli­giones tradicionales comienzan a cojear. De éste modo, los OVNIs cubren ése hueco. Esquemáticamente explicado, viene a ser la Diosa Man de los vascos aliada a la tecnolo­gía.

 

 

-¿Cómo os decidisteis a llevar adelante el experimento?

 

-Como todo el mundo sabe, el hombre llegó a la Luna en 1968. Pues bien: en aquel año se produjo una gran oleada de carácter mun­dial, probablemente provocada por aquel extraordinario evento. Nuestra intención era reproducir ese efecto a pequeña escala... y funcionó. No tuvimos más que inventarnos los dos o tres primeros casos. Después eran los propios periodistas quienes acudían a nosotros a informarnos de más incidentes OVNI.

 

 

 

En efecto, el experimento funcionó. Incluso hoy la gente recuerda el OVNI de Peñas de Aia y la mini-oleada de los días precedentes. Las reacciones del público, prensa, radio, televisión y la rápida aparición de diversos investigadores OVNI no se hicie­ron esperar.

El proyecto constó de tres fases dife­rentes. La primera de ellas estaba encami­nada a motivar la opinión pública irunesa mediante la publicación de algún que otro caso OVNI falso y abundantes cartas al director comentando temas relacionados con la ufología. La segunda fase abarcó la reali­zación de un montaje eléctrico que hiciera las veces de objeto luminoso no identificado. Finalmente, se procedió a una recogida de testimonios y su posterior análisis.

Como pistoletazo de salida al Proyecto Iván, los días 11 y 17 de diciembre de 1978 se enviaron cartas al rotativo “La voz de España” informando de futuras con­ferencias del C.E.P. sobre ufología. Sin embargo, la intención velada de las misivas era ir popularizando el tema OVNI. Acto seguido, en los días 23, 24 y 27 de diciem­bre los miembros del C.E.P. se afanaron en “colar” los primeros avistamientos falsos en el periódico “El diario vasco” y la emisora “La voz de Guipúzcoa”. Los casos OVNI, consis­tentes en pintorescas apariciones de enor­mes objetos discoidales multicolor y sobre­cogedores resplandores, estaban adereza­dos con nombres y apellidos, muchos de ellos deliberadamente inventados.

   Fue el mismo día 27 cuando salieron a la luz pública los primeros casos OVNI, en los cuales nada tuvieron que ver los promo­tores del experimento. Como era de esperar, el Proyecto Iván comenzaba a dar sus frutos.

La emisora “La voz de España” difun­dió una noticia que resumía de forma por­menorizada el caso protagonizado por cinco niños de entre 10 y 15 años. Estos afirmaban haber divisado en el Alto Errondo de San Sebastián diversas luces rojas y blanqueci­nas. Sin embargo, las pesquisas de los miembros del C.E.P. concluyeron que se tra­taba de un avión.

A partir de entonces el seguir inven­tando casos se volvió innecesario. Diversos testimonios “auténticos” se fueron produ­ciendo espontáneamente, cumpliendo así la hipótesis del C.E.P.

Sin embargo, el experimento culminó con la colocación, el día 4 de enero (Luna nueva), de un autentico OVNI en las Peñas de Aia. El artilugio, compuesto de luces de colores y flashes fotográficos sincronizados, todo ello sobre un vehículo inmóvil, permiti­ría al C.E.P. comprobar la percepción de los testigos acerca del movimiento. Abajo, en la ciudad de Irún, una serie de ganchos se encargarían de llamar la atención de los viandantes y hacerles mirar hacia el conjun­to de luces.

Los efectos de aquel último paso del experimento fueron realmente sorprenden­tes. Según los datos recogidos, muchos de los testigos creyeron percibir cómo el objeto oscilaba ligeramente. Otros creyeron desde el principio que flotaba. Y casi la totalidad de los testigos tuvieron la sensación de que el objeto aumentaba y disminuía de tamaño. Unas pocas personas aseguraron haber visto al objeto aterrizar (!), y otras juraron haber divisado al objeto sobrevolando el tre­cho existente entre el monte San Marcial y la auténtica ubicación del montaje luminoso.

   Así lo reflejó el diario “Unidad”, al señalar que “el objeto sobrevolaba (hay que emplear palabras adecuadas) en torno a San Marcial.” [Transcripción literal.]

Como se ve, fue todo un espectáculo; espectáculo que aún hoy es recordado por los iruneses como una auténtica oleada OVNI.

Juan Antonio Puerta concluyó dicien­do que “todo aquello que no es explicable se mete en el cajón desastre de los extraterres­tres. Es lo más fácil.”

La duda que surge tras conocer las conclusiones del Proyecto Iván es la siguiente: si es cierto que una oleada puede ser inducida, ¿acaso la mayoría de sucesos OVNI sin explicación racional obedecen a la sugestión? Eso, por ahora, nadie nos lo puede asegurar.

 

Inko Zubillaga.

 

Modificado el ( jueves, 14 de diciembre de 2006 )
 
< Anterior   Siguiente >